La distancia que se tiene de una persona, la imposibilidad de alcanzarla, no se mide por su longitud, sino por el nivel de ausencia que ha dejado, por el espacio que no puede ser llenado, por su intangibilidad, por la desesperación y el deseo por volver a verla y que sólo quede frustración y resignación por momentos diarios que te siguen hasta el final.

No hay como el sexo para esclavizar o por lo menos, no encuentro un método que sea más barato y produzca al mismo tiempo saberse atado a un placer que no quieres dejar.

Momentos encontrados

¿Qué es lo que impide amar? (lo pensaba mientra te miraba) y encontré la respuesta -por lo menos, en mí caso- tras evaluar nuestra relación, ver tu comportamiento y un largo, etcétera, me di cuenta, que te conocía en muchos aspectos, (desafortunadamente, pienso que te conozco totalmente)y ese es el problema. El amor, como la magia, necesita de secretos, -lo oculto me atrae, el no saber que...- ahora sé quién eres y me agrada tu forma de ser, pero necesito una dosis de mentira, necesito la incertidumbre, para que al final, me de cuenta que lo que necesitaba ya lo tenía, y no eras tú, ni otra persona, nadie. Sino la decisión de permanecer con alguien, por fugaz que fuera, por eterno que sea: Sentimientos, momentos y elecciones, forman parte de nuestras relaciones.

Cuando todo el plan ha sido destruido, cuando la esperanza terminó en martirio, ante estas circunstancias, debo encontrar una nueva actitud y la única palabra que describe tal cosa me viene a la mente, tengo que ser...IN-DI-FE-REN-TE.

Ahora hazme olvidar mi pasado, pero no me hagas recordar este momento, que es la misma razón que generó mi descontento.

Curiosidad

Perseguido por la curiosidad, innata en mi naturaleza, me encuentro seducido por la extraña sensación de lo desconocido.