domingo, 21 de febrero de 2010

Soy bueno en el amor
fatal para el odio
pero para la indiferencia sí que tengo talento.
No te pongas en esa actitud. Bueno, hazlo.
pero tendrás que desistir de ella.
Este es mi momento.

martes, 9 de febrero de 2010

Traicionado por la canción

Me subí al taxi y me acordé de ti. Sonaba una canción en la radio, esa de Arjona: "dime si él te conoce la mitad...dime si él tiene la sensibilidad de encontrar el punto exacto donde explotas al amar..." Esa canción, muy buena. ¡Pero que va! Es tan sólo una canción, nada que ver contigo. Tu no "explotas", te pones loca de atar. Casi me destrozas la yugular y me arrancas la lengua. Me sentí traicionado por la canción, pero a veces la canción es tan sólo eso.
Ahora me quedan dos opciones: buscar un referente musical que concuerde contigo o ponerte un bozal para cuando se te ocurra "explotar".

viernes, 5 de febrero de 2010

Un día extraño

Reconozco ese aroma y no es como hace tiempo. No me brota el deseo ni las ganas que me llevaron a despojarte de las vestiduras que impedían besar y acariciar tu piel. No, hoy sólo es un buen aroma y un hermoso recuerdo.

A quemarropa

Desde ese día no siento mucho deseo por hablar y por el momento, trato de racionalizar las palabras, de no hablar de más ni de menos (Sólo quiero decir lo necesario). Me mantengo quieto, ordinario, sencillo. Digo una que otra frase, palabra, idea. Sin tristeza alguna, sin excitación alguna. Sólo tranquilidad. Ya grité y escupí palabras nada gratas. Cual arma cargada, las palabras hicieron su propósito. Te asalté y a quemarropa grité (con una sensación de enojo y en parte de liberación). Sé que fue fulminante para tu corazón. Mi boca no sabe igual desde entonces, mi voz no es la misma. Las palabras quemaron mi garganta. Pero qué podriamos esperar: tú que tanto gustas de amar y yo que nunca me quiero callar.